El Servicio de Policía todos los días gravita entre la percepción y la realidad de la convivencia y seguridad ciudadana, principio fáctico que contempla como reto mejorar constantemente el desarrollo de una nueva armonización articulada dentro y fuera de la institución con la comunidad organizada, lo cual requiere del fortalecimiento de las competencias del talento humano policial, mediante el desarrollo de conocimientos, habilidades, experiencias, principios y valores, enfocados en la legitimidad social desde la gestión organizacional como fuente de progreso del capital humano y social de la Institución, para prestar un mejor servicio a la comunidad.